La incertidumbre, amiga del emprendedor según Milagros Cabral ¿Y si sí?
Regli Gómez
Fecha 17 julio 2020
Mariquita Trasquilá. Pasar de una tienda de 10 metros cuadrados a facturar dos millones y medio de euros en su página web y convertirse en referente nacional para la compra de trajes de invitada de eventos.
¿Que cómo lo ha hecho? Eso he querido saber yo. Bueno, no. Lo que yo quería era conocerla a ella: Milagros Cabral. Y es que, ando en búsqueda constante de historias de personas que tienen mucho que aportar. Inspiración lo llaman ¿No? Pues eso.
Quedamos en su casa, donde me hizo sentir como en la mía. Té en la mesa, tecnología, ella, su perra y yo. Paisaje idílico. Al menos para mí, que iba en mi versión más esponja.
Hablamos de muchas cosas, pero aquí te cuento lo que creo que nos puede servir a todos los emprendedores del mundo mundial.
Milagros ¿Dónde crees que está la clave del éxito en un negocio como el tuyo?
Pues, mi suegro (le sigue llamando así aunque ya no esté casada) era un hombre de negocios y él me enseñó una de las claves de Mariquita Trasquilá. El cliente SIEMPRE TIENE LA RAZÓN. Para qué discutir asuntos que sabes que van a acabar en una devolución. Si el color no es el mismo que ella vio en la web, si se ha lavado y se ha estropeado, si la talla no es la correcta. Sea lo que sea y como sea es básico una atención personalizada que acabe en un cliente satisfecho. Para todos es mejor.
Así que “mis chicas del cable”, las que están detrás de las teclas y del teléfono siempre atienden con total amabilidad y con soluciones sin problemas para todas mis mariquitas.
¿Te consideras una persona de éxito?
Sí, lo cierto es que sí. Aunque no sepa muy bien dónde quiero llegar pero, ¿Y dónde ya he llegado?
¿Y qué echas en falta de tus inicios?
Ahora mi equipo ronda las 20 personas pero echo de menos la implicación que teníamos cuando éramos pocas. Estábamos muy unidas y entusiasmadas y le echábamos las horas que fuesen necesarias, aunque eso implicara hacer sorteos de manera manual o contestar cada mensaje totalmente personalizado. Ni copiar/pegar sabíamos.
Entonces empiezas a crecer, de manera muy rápida. Recuérdate en ese punto y dame un consejo para aquellas personas que dirijan una empresa y estén creciendo.
Que contraten profesionales. No podemos saber hacerlo todo, ni tenemos tiempo para ello. Al principio era una locura, una locura no productiva. Apostar por personas que te ayuden a hacerlo mejor es una inversión, no un gasto.
La empresa se me ha quedado grande muchas veces. Es como empezar de nuevo una y otra vez. De hecho ha habido épocas de comenzar una obra cada seis meses. Una locura. Mi locura.
¿Cómo decides tus colecciones?
La experiencia ayuda. La cercanía de Mariquita Trasquilá ha facilitado la posibilidad de llegar a mujeres diversas y soñadoras. A pesar de que tenemos un público muy diverso la experiencia me ayuda a decidir modelos que sé que van a triunfar.
Son ellas quienes han hecho la marca, partiendo de nuestros valores, claro está.
Eso sí, si se sube un modelo y en las primeras horas hay varios vendidos, ya sé que va a ser un éxito y hay que fabricar o pedir más. Si ocurre lo contrario es indicativo de que a la comunidad no ha gustado y por tanto, aprendo.
Tus “mariquitas” son soñadoras pero ¿Y tú?
También. Además me encanta la incertidumbre. Doy pasos cuando voy al límite para ver qué ocurre, asumiendo riesgos. La adrenalina que eso genera me automotiva mucho.
Además soy muy atrevida. Si para encontrar un modelo que a mí me guste o cualquier otra cosa hay que ir a Italia, por poner un ejemplo, no me las pienso que ya tengo el billete de ida en la mano.
Nota de autora. ¡Bravo! Ojalá todos supiésemos asumir la incertidumbre con tanta estoicidad y atrevernos más a ir a buscar nuestros sueños sin pensar demasiado en las consecuencias.
¿Qué echas de menos de tus inicios?
Pues sigo siendo la misma pero noto que tengo menos miedo y estoy más relajada. A veces me hace perder la chispa, entonces me digo “Lucha como si no tuvieras nada” Y eso hago. Siempre es bueno mantener algo de esa adrenalina que te quita el sueño.
¿Y de la soledad del emprendedor qué tienes que decir?
¿Y si te digo que a mí me gusta? Prefiero vivir el miedo en soledad. Si cuento alguna “locura” que se me ocurra me arriesgo a que me quiten las ganas y me inunden de “peros”. Prefiero tomar la decisión en soledad y, si me caigo en el camino, saber que me van a apoyar y ayudar a levantarme.
¿Qué consejo le darías a un emprendedor?
Se me ocurren dos. El primero, que no deje de soñar. Así no pierdes la ilusión nunca. Si pierdes la ilusión lo pierdes todo. El segundo es que haga la suya la frase ¿Y si sí?
¿Y si te lanzas y tienes éxito? ¿Y si contratas a alguien y vendes más? ¿Y si apuestas por ti y tu proyecto? ¿Y si inviertes en una reforma para cambiar la imagen de tu negocio? ¿Y si lo consigues? Ainssss, me quedo con tantas cosas de este encuentro… de las que se pueden contar, de las que se hablan “entre tú y yo” y de las que se sienten pero me quedo con la emoción para mí porque prefiero no compartirlas. Este encuentro, en todas sus versiones ha sido una de las charlas más enriquecedoras que he tenido en este tiempo. Gracias Milagros. Como mi siempre, de corazón.